El hombre un ser en relación, un ser comunicación
Cada uno de nosotros como individuo y miembro de una comunidad, nace y crece en una experiencia de diálogo. Es decir, que para desarrollarnos, necesitamos ampliar nuestra capacidad de relacionarnos, de abrirnos a las riquezas de nuestros semejantes.
La posibilidad de comunicarse, de dialogar, permite que el ser humano madure como tal, en comunidad, junto con otros seres humanos.
En este contexto, el resultado de los intercambios comunicativos que cada comunidad va tejiendo, es lo que llamamos cultura.
La capacidad de comunicación de todos los seres humanos se manifiesta en todas las dimensiones de su ser persona. Por esto podemos definir al ser humano como un ser relacional.
Necesitamos de los otros para desarrollar nuestras capacidades en todos los niveles.
* Desde lo biológico, el hombre necesita desde su gestación de la presencia del otro; para crecer el bebé requiere de los cuidados familiares. Recibirá la influencia del medio ambiente. Desde su mismo cuerpo está llamado a complementarse con otro para gestar y dar origen a nuestras vidas.
* Desde lo psicológico, necesita los vínculos interpersonales. La confirmación o reprobación de los demás son fuentes de grandes ayudas o de graves dificultades. De esta manera, cada uno va construyendo su personalidad.
* Desde lo social, el hombre necesita insertarse, sentirse parte de una comunidad. El ser humano, para desarrollarse en todas sus posibilidades, precisa reconocerse como ciudadano, trabajador, padre o madre de la familia, amigo; partícipe de la vida política, económica, recreativa.
* Desde lo espiritual el hombre puede abrirse a valores, ideales y al encuentro con lo sagrado.
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